domingo, 14 de noviembre de 2010

MuSo De InVeNcIóN

Susúrrame al oído tus palabras infinitas. Aquellas preguntas que lanzabas al aire, aquellas que yo no respondía. Perdida, grité: ¡Ayúdame, ayúdame a volver a aquel lugar dónde era feliz! Vuelve a traer la respuesta a mis labios cerrados y a mi boca, que enmucede sólo con oír tus pasos alejándote.
Acercate! Quiero sentir tu aliento en mi piel y que tus manos acaricien el sol. Cuidado! No te quemes por favor.
LLevame lejos, al lugar donde los árboles son azules y el paraíso existe!
Escribe, escribe para mí! Nunca dejes de hacerlo porque yo nunca lo haré. Repite tus palabras, repítelas una y otra vez! No me dejes caer en el olvido.
Escribe para mi...Aquellas palabras de ayer!

5 comentarios:

  1. Estoy segura que tus palabras llegarán hasta plumas o teclados que saben oir, y que escribirán una y otra vez para ti.
    Un beso

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  2. Hola Dede!!!

    Está claro que si una persona conoce la entrega, practica el altruismo, y escribe como lo realizado... nunca te faltarán apoyos más tarde o más temprano.
    Como dice el refrán: Hay que sementar para recoller.

    Bicos dende as terras do Miño.

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  3. escribe,escribe para nosotros!! porque tus palabras me hiptnotizan!!!
    un beso bonita!

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  4. Esas necesidad de existir en las palabras... del otro!
    Linda entrada!
    Besos!

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  5. Write, baby, write!
    Me ha encantado, bella. ¡Gracias por tus vibras! Lo valoro muchísimo.
    Regresé del retiro más enamorada de la vida, con muchísima esperanza en todo: en las personas, en la experiencia, en mí.
    ¡Me encantará compartírtelo un día de estos!

    Siente un besazo. También te quiero mil :D

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